Un día elegí una profesión “canalla” para muchos, apasionante para otros, donde actualmente hay muchos profesionales trabajando en precario. Yo empecé hurgando en la investigación; la libertad de expresión en el mundo siempre me ha inquietado, en particular, cuando se hace caso omiso de este derecho fundamental. Pero, como les ha ocurrido a otros muchos profesionales, me contagié con la gripe de la radio, y aprendí a gatear en los pasillos de RNE. El micrófono y yo tuvimos un affaire y hoy sigo tan enamorada de él como el primer día. Mientras me iba gestando en la cuna de la universidad pensaba que un periodista debía conocer todos los medios, y eso hice: gabinetes de prensa, medios escritos, digitales y el apasionante análisis de la comunicación cuando estamos en plena campaña; por no mencionar mi coqueteo con la literatura. Hay muchas vocaciones que se han quedado en la señal que indicaba el camino, así pues, que este espacio sirva para alentar a quien alguna vez sintió que llevaba o lleva un periodista dentro. Mi más afectuoso saludo. Ana B.
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2 comentarios:
Te deseo el mayor de los éxitos para éste y todos los proyectos que inicies.
Querer es poder, pero los mejor formados y los que tienen habilidades para algo son los que más fácilmente pueden conseguirlo y más fácilmente transmiten a los demás la magia de la ilusión.
Besos
Zafia, definitivamente el talento y el tesón son dos atributos que van de la mano. Y ambos se reflejan en tí, en tu capacidad de iniciativa y en tu transgresión de lo común. Te deseo un camino largo y generoso en éxitos. Muchos abrazos de alguien que te quiere y te admira.
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